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domingo, 16 de febrero de 2014

Laura Fuentes - "Danzas Rumanas de Bartok"

http://www.youtube.com/watch?v=9OHmo8yq-Ts

Vídeo realizado por Albalate Productions para publicitar la actividad cultural y de ocio del pueblo de Albalate de Zorita.

jueves, 5 de abril de 2012

Música para la Libertad



“La música como farmacia eficaz”

Ponente: Paco Herrera

El pasado viernes 23 de Marzo vino desde Sevilla Paco Herrera para contarnos su experiencia sobre Musicoterapia en Cárceles.

Uno de los objetivos en los que incidió durante las sesiones con personas privadas de libertad fue crear CATARSIS, como medio para sacar la rabia interior, el desahogo…
Es decir, debemos utilizar la música como estímulo sensorial afectivo y penetrante, para recrear experiencias y sentimientos de la vida real. Éste contacto con la realidad puede ser atractivo y reforzante. Se pueden construir estructuras sanas y apropiadas de feed-fack e interacción social. La tensión, el estrés y la ansiedad se pueden canalizar y difundir de manera constructiva. Dentro de un entorno poco tangible y con escasos medios físicos para proporcionar estas experiencias, la música tiene un papel fundamental.

Nuestro ponente nos hizo ver que las intervenciones de musicoterapia ofrecen al paciente privado de libertad un medio agradable de expresarse y de compartir pensamientos y sentimientos personales de una manera estructurada y constructiva. A través de las experiencias musicales, el individuo puede aprender a formular y a organizar adecuadamente pensamientos y sentimientos personales. Además de aprender disciplina, control de impulsos y habilidades sociales (Thaut, 1987).
Algunos de los programas/talleres que creó Paco dentro su proyecto “Aires de libertad” fueron:
Ø   “Como caballo de Troya” (opera Rock)
Ø   Creación de discos en el que participaron los presos y auxiliares de la prisión de Sevilla.
Ø  Montaje de diversas obras de teatro donde incorpora otros talleres como el de carpintería, aluminio, maquillaje….para la representación final
Ø   Programa de radio

Algo que se pudo observar en el material audiovisual que nos proyectó Paco, fue el trabajo desde la improvisación.

Las sesiones de improvisación instrumental de grupo permiten la comunicación entre los usuarios a través de una variedad de instrumentos. Los usuarios aprenden a expresar y a comunicar de manera apropiada los sentimientos como la rabia, la alegría, la celebración, el descanso, la pena…

Muchas veces los usuarios no se pueden comunicar verbalmente de manera apropiada e interaccionar y expresarse de manera organizada y coherente por ello después de la improvisación musical, la conversación de grupo que sigue se centra en la experiencia musical como experiencia de aprendizaje conductual para practicar la interacción social, sentir y comunicar emociones, descargar la tensión y reducir la ansiedad y experimentar la realidad de manera gratificante y no amenazante.

Como señaló Paco estos proyectos son muy necesarios para la rehabilitación de los presos, pero desgraciadamente no tienen ningún tipo de subvención económica para poder sustentarlos. Solo funcionan por el altruismo de algunas personas como Paco, que desinteresadamente emplean su tiempo libre en proyectos tan humanos como el de “Aires de Libertad”.

Desde aquí Paco, enhorabuena por este bello trabajo, sigue difundiéndolo y animándonos a creer que cualquier reto que nos propongamos en posible.
GRACIAS

“Los sonidos del silencio”, mi canción preferida de Simón y Garfunkel. ¿Coincide con la tuya?

La percepción y el significado de la música dependen de la historia gradual y cultura del individuo…”, decíamos en nuestras primeras sesiones de musicoterapia.
Después de la magistral exposición de los profesores Dr. Jorge López y Dr. Eduardo Gutiérrez sobre los fundamentos biológicos de la musicoterapia se me plantean algunas cuestiones:
Estoy de acuerdo con que los procesos mentales que llevan a la percepción de fenómenos como la música son muy difíciles de definir y entender. Pero; ¿Existen condicionantes fisiológicos que contribuyan a determinar nuestro gusto musical? Y si es así; ¿Hasta qué grado el gusto musical, y eventualmente el gusto estético en general, están determinados por los mecanismos de funcionamiento de nuestro sistema nervioso?


El sonido de la tiza raspando la pizarra  puede causarnos escalofríos y una desagradable sensación, una bella melodía inmenso placer y relajación. 

¿Qué hay detrás de estos fenómenos? ¿Qué ocurre en nuestro cerebro? 

Hay ciertas combinaciones de tonos que resultan desagradables al oído independientemente del aprendizaje y de la cultura del individuo. Según el Instituto de Fisiología de la BUAP, México:  La razón está tanto en las propiedades mecánicas de la cóclea como en las propiedades de la red neuronal que procesa la información auditiva, imponiendo con ello importantes condicionantes para la detección del sonido y la sensación emocional que éste puede suscitar”.

Otra de las preguntas que se me plantean es si el cerebro de los músicos es diferente al de los no músicos; ¿Existe una predisposición para la música o se puede adquirir?
Siempre he creído que todo es educable. Si no lo creyera así hubiese tirado la toalla muchas veces en mis cinco años como profesora de Iniciación a la música y violín.

En mis clases de violín tengo varios perfiles de alumnos:
Dos son extremadamente opuestos. Doy clase a una alumna de 33 años que comenzó hace un año y medio a tocar el violín, ahora toca grandes conciertos pero no puede afinar el instrumento. Es incapaz de saber cuando está afinada una nota o cuando no.
Es muy técnica y le dedica muchas horas al violín, y eso hace que toque grande obras, pero por el momento no he conseguido que oiga e identifique la correcta afinación del violín. Toca gracias a unas marchas que le he puesto en el violín como referencia de donde tiene que poner el dedo, pero no se atreve a quitarlas. Ella siempre me dice que no tiene oído y que por ello no puede tocar ninguna melodía que no esté escrita.

Otro de los casos es un niño de 10 años, desde bien pequeño su padre le llevaba a conciertos de música clásica y le encantaban, así que cuando cumplió los 5 años no dudó en apuntarlo a clases de iniciación musical. Aún recuerdo con cariño el primer día que vino a clase, fue mi primer alumno.
Este niño escuchaba mucho el CD del libro Suzuki (método que utilizo en mis clases) donde venían todas las canciones del método, y sorprendentemente a los pocos meses de empezar a tocar el violín llegaba a clase y podía pasar una, dos y hasta tres lecciones por día. Todas perfectamente interpretadas y afinadas. Tenía guardado en su memoria auditiva todas las canciones del Suzuki, pero cuando le ponía otra partitura que no había escuchado nunca le era muy difícil saber leer la partitura. Este niño sí que es capaz de sacar canciones que le gustan y ahora escribirlas en papel.

Volviendo a la pregunta de antes: ¿Existe una predisposición para la música o se puede adquirir?
Bajo mi experiencia creo que sí existe una predisposición para la música (y para cualquier otro campo) pero esto no quiere decir que por ello ya seas un artista. Tienes que trabajar esa predisposición. Si todos estos factores se unen puedes llegar a ser un prodigio, como Mozart.
Sin embargo también creo que sea educable, y por lo tanto se pueda adquirir. Aunque no tengas cierta predisposición fisiológica para la música o cualquier otro campo, si desde pequeño has trabajado en esa disciplina, puedes llegar lejos.

Diversos estudios han encontrado diferencias anatómicas y de funcionamiento a nivel del sistema nervioso central en músicos, apoyando así la teoría de la plasticidad neuronal y la modificación de las conexiones neuronales según los estímulos y las experiencias de cada individuo. Estos estímulos sonoros pueden tener efectos a nivel de las emociones, la memoria, la frecuencia cardiaca, tensión arterial…, pero también efectos perjudiciales si no realizamos un estudio de cada persona a la que se lo apliquemos  como terapia. Por ello es necesario tener una visión científica a la hora de utilizar la musicoterapia,  para saber que podemos ejercer efectos beneficiosos.

               “No existe casi ninguna parte del cerebro                           que no se vea afectada por la música”
                    Stefan Koelsch

sábado, 3 de marzo de 2012

BIODANZA


“El lenguaje de la emoción”

“Donde mueren las palabras, comienza la danza, la música "........ y escuchamos la resonancia de nuestras vidas. De pronto, interviene el coordinador y hace manifiesto un emergente.  Mágicamente produce un cambio.  Nos tumbamos, nos paramos, volvemos a caer y nuevamente en pie. ¿Así será siempre?  ¿Qué es esto?.... ¿Una ópera?..... ¿Una cantata?..... ¿Una novela?..... ¿Una danza lingüística y emocional?......  ¡Sr. Facilitador! : ¿Será esta la vida misma?


A medida que pasa el tiempo los seres humanos estamos cada vez más inmersos en la tecnología, pero menos comunicados entre nosotros. La tecnología, con su avance, nos facilita conocer simultáneamente lo que está sucediendo en cualquier parte de la tierra, pero ningún avance tecnológico nos dará la posibilidad de cerrar los ojos y tener una mirada interior que nos permita conectarnos con nuestros sentimientos y emociones que, sobre todas las cosas, son únicas y propias de cada uno de nosotros.

Podemos trabajar de muchas formas nuestros sentimientos y emociones, pero no de todas se obtienen resultados tan sorprendentes como los que conseguí sacar el pasado sábado en el máster de Musicoterapia.
Trabajamos con Biodanza. Hasta el momento era una disciplina nueva para mí. La incertidumbre me pudo y enseguida me metí en Youtube a ver vídeos sobre esta disciplina. No me quedó muy claro. En los vídeos aparecían grandes grupos dándose abrazos, moviéndose y sin hablar… Interesante… pero ¿raro?

Hoy puedo describir la Biodanza como el  lenguaje de la emoción.

Esta experiencia fue algo inesperada y a la vez agradable.

Comenzamos la sesión con una ronda en la que la presencia de cada participante era relevante, valorando nuestra singularidad y diversidad en un solo espacio.

No se habló durante la sesión, pero no hacía falta hablar. La mayor parte de nuestra comunicación con los otros no fue a través de la palabra, sino de nuestra gestualidad y postura corporal; De tal modo, que aquí hablaban el cuerpo, las emociones, nuestras miradas… difícil de explicar, pero fácil de hacer, ya que no costó ningún trabajo.

La facilitadora nos ofreció un breve contexto del contenido de la clase de forma sencilla, dejando claro que la Biodanza no es un dogma, ni una religión, ni un sistema de creencias específico, sino que es un espacio que invita a la persona a encontrarse consigo misma, con el otro, con la vida…

Después de colocarse la primera música, inmediatamente las emociones empezaron a fluir. Hello goodbye, una de mis canciones preferidas de los Beatles. Muy apropiada para empezar a sentirme libre en este espacio y sacar todo lo que llevaba dentro.

Empezamos a caminar por el espacio como si no hubiese mañana, más libres que nunca, saludando con una sonrisa a todos los que nos encontrábamos a nuestro paso. No porque nos pidieron que tuviéramos que sonreír sino porque ya habíamos entrado en el círculo de la biodanza, salía solo. Y así fue transcurriendo la mañana. Hicimos ejercicios individuales, por parejas, en grupos…

El vivir esta maravillosa experiencia me ha hecho darme cuenta y sentir que una mirada puede sustituir mil palabras, de que un gesto es más valioso que cualquier otra acción, y que una caricia puede significar una inmensa alegría.

Me ha ayudado a  dejarme sentir sin juzgar ni analizar las emociones o sentimientos que surgían de lo más profundo de mis células; sino dejar simplemente a dejar que fluyan. También me ha dado la oportunidad de conocer a muchas y muy diversas personas. La inmensa mayoría de ellas abiertas, amables, cariñosas, que me han acogido con afecto en mis primeros pasos de movimientos torpes y rígidos, y que me han ayudado a  permitirme explorar en ese campo sin sentirme ridícula. 

Igual todo esto suene un poco abstracto, demasiado terapéutico o incluso a algunos les parezca algo extraño, pero realmente os aseguro que funciona.

Sé que es difícil de explicar, de hecho cuando llegue a casa intenté transmitir todo lo que había sentido, pero es imposible. Hay que vivirlo y os animo a ello.


martes, 21 de febrero de 2012

A MI GRAN LUCHADORA

Sé que hay cosas que volverán a cobrar vida algún día, pero por el momento ya no tienen sentido.

Una de ellas es la reciente fiesta de San Blas, a la que acudíamos todos los años a tocar; Los domingos por la tarde que eran parada obligatoria para ir a verte. La sonrisa y el abrazo preparado antes de llegar a la habitación 115, ver caer el agua en la cascada del patio de la residencia, los conciertos con poesías interminables, la estampa que me protegería al llevarla en el coche… Tantas y tantas cosas que tú hacías especiales.

También hay otras que han cobrado más sentido gracias a los consejos que continuamente me recordabas…
-          ”Laura, tienes que estar con un chico trabajador, que te quiera….”

Éstos me ayudarán a ser como tú, alguien especial, una super abuela a la que no se le iba ni una; La persona más tolerante que he conocido para la época en la que te ha tocado vivir, aquella que se ganaba el cariño incondicional de todo su alrededor; Cabezona, mucho; Pero a la vez prudente y previsora; Muy golosa y coqueta:
-          “Tengo que ir a la peluquería”
-           “Otra cosa no… pero arrugas no tengo ¿A qué no?



Llámame egoísta abuela, pero sigo queriendo haber disfrutado más tiempo de ti…

Ya ha pasado casi un mes desde que nos dejaste y aún sigo mojando por las noches la almohada de mi cama. Siempre has sido la institución de la familia, y para mí una gran referente.

A pesar de todo estoy contenta. Te recuerdo con mucho cariño y doy gracias porque he tenido la oportunidad de conocerte y tenerte cerca hasta ahora, he disfrutado mucho de ti y me has enseñado mucho.

Tú has sido alguien importante y especial para mí, siempre formarás parte de mis pensamientos y decisiones. Gracias por todo lo que me has dado y enseñado; por tu compañía, tu apoyo, tu comprensión y presencia.

No me despido, pues de una manera u otra siempre estaremos juntas.

Laura

domingo, 5 de febrero de 2012

APRENDIENDO A CREAR


Debajo un botón, ton, ton, que encontró Martín, tin, tin, había un ratón, ton, ton, ¡ay! que chiquitín, tin, tin… Así empezamos nuestra clase, pero: ¿Era esto un simple juego?

Gracias a Alicia Wechsler pudimos comprobar que había un trasfondo muy importante detrás de esta y otras muchas canciones que sonaron en el taller. Nos dimos cuenta que a través de ellas, podíamos desarrollar nuestro potencial creativo y nuestra capacidad de expresión, así que imaginaos en los niños, que son espontaneidad pura, lo que puede suceder…

Ya lo he comprobado en mis clases de “Música y Movimiento”, y os aseguro que da resultado.

La creatividad es un aspecto importante del desarrollo porque genera procesos (discriminación, integración, síntesis) que conmueven y liberan asuntos internos desde lo espontáneo y a su vez utiliza reglas (juicio) que potencian la adaptación activa y transformadora de la realidad y sus contextos (Crear Salud - Aportes de la Musicoterapia preventiva -Patricia Pellizzari pág42).

Por ello uno de los aspectos en los que incidimos es en que el objetivo inicial no es formar músicos sino sujetos libres, equilibrados y felices que puedan disfrutar de la vida.

Otro de los aspectos en los Alicia incidía es la importancia del ritmo ya que desde muy pequeños los ritmos nos hacen movernos.

Cuando trabajo con mis niños ejercicios de marcar el ritmo, ellos  lo hacen de forma natural. Es un ritmo parecido al del latido del corazón, entre uno y dos golpes por segundo.

 También he observado que cuanto más rápido marcamos el ritmo, más les levanta el ánimo y les da energía. Los científicos piensan que se debe a que en nuestro interior sentimos que estamos escuchando los latidos ir más rápido y eso nos hace sentirnos entusiasmados. Pero la música consigue algo más que sentirnos alegres o tristes…despierta en nosotros todo un abanico de emociones. Me gusta jugar mucho con esto para poder canalizar sentimientos, sensaciones…funciona a la perfección.

Otra de las cosas curiosas que he descubierto es que les apasionan los sonidos fuertes. ¿Por qué?

Según diversos estudios, estos sonidos tienen un efecto muy particular en nuestros sentidos. En el interior del oído junto al diminuto caracol con el que oímos, hay una serie de estructuras diseñadas para percibir como se mueve la cabeza. Una de ellas es el sáculo, una bolsa llena de una sustancia gelatinosa que nos dice lo rápido que estamos avanzando. En principio el sáculo no tiene nada que ver con la audición, pero las investigaciones recientes sugieren que en ciertas frecuencias los sonidos altos puede hacer vibrar tanto el oído interno que cuando el sáculo también se sacude, sentimos lo mismo que si estuviéramos en caída libre. Por eso los sonidos altos nos producen una repentina sensación de placer. Según esta teoría el volumen tiene que estar por encima de los 90db, pero escuchar algo a ese volumen durante un tiempo podría acabar dañándonos el oído.

Curioso, ¿verdad? Lejos de estas investigaciones, lo que sí he comprobado durante mis años de experiencia es que el trabajo con música consigue en los niños un aumento de la capacidad de escucha y observación, un mejor autoconcepto y autoestima; reduce problemas de comportamiento y en consecuencia mejora el rendimiento académico. También aumenta las habilidades afectivas, comunicativas y sociales; y se incrementan las conductas cooperativas. Por ello, lo mejor es iniciarles en experiencias musicales cuanto antes.




Muchos papás ya han tomado conciencia de ello. Ahí os dejo una imagen de uno de mis grupos.

lunes, 16 de enero de 2012

Encontrando camino…



Como muchos de vosotros sabéis por fin me he matriculado en lo que llevaba tiempo arrastrando, LA MUSICOTERAPIA.

La descubrí en una de las asignaturas de Educación Especial y siempre la he llevado muy presente. Tras acabar Psicopedagogía y tras un verano de desconexión me planteé varias opciones, pero algo dentro de mi me devolvía a la musicoterapia.

Después de mucho buscar decidí hacer el máster en la Universidad Alcalá de Henares, hablé  con el director del mismo máster y no me quedaron dudas de que ese era mi sitio. Un hombre encantador.

El máster consta de 3 cursos: 1º teórico, 2º práctico, 3º Trabajo de investigación fin de máster. Como este año tengo “tiempo” me he decido a hacer 1º y 2º a la vez.

Hacía mucho que no me sentía tan a gusto en un sitio; Creo que mi perfil tanto profesional como personal encaja a la perfección en este máster. Gracias a él estoy pudiendo unir dos de mis campos: la terapia y la música. Es increíble.

Aquí os dejo un vídeo como anticipación, pero iré colgado todos los ensayos que estoy haciendo sobre las sesiones que vamos teniendo.

Un abrazo